Nos situamos en el viernes día 15 por la tarde. Tras tener el corazón en vilo por obtener una acreditación para la Mostra de Cine de Valencia (la cual ya dábamos por perdida) y así poder realizar un reportaje para Periodismo de Cultura..., zas! el mismo día que empieza nos avisan de que sí que disponemos de ella y ale..., a correr.
Salimos de clase de radio ante la mirada atónita del profesor. Creo que es en una de las pocas carreras universitarias en la que puedes decir "perdone, es que tengo que ir a recoger una acreditación para la Mostra de cine, me voy de su clase". Y nada, allí íbamos Mari Carmen y yo, corriendo como si nos fuera la vida en ello y dispuestas a llegar a la primera rueda de prensa con Wolfgang Petersen, director de películas como "Troya" o "La Tormenta Perfecta". Empezábamos a alucinar.

Y a partir de ese momento todo siguió una placentera rutina. A las 9 de la mañana llegaba el primer pase de prensa. El primer día parecía un poco "heavy" intentar prestar atención a una película (todas las que allí estábamos nos hemos dormido en algún momento en plena visualización) pero saber que vas a dedicarte toda una mañana al tema cinéfilo no tiene precio. Tras el pase de las 9 llegaba nuestro café "nexpresso" con croissant gratuito, todo un placer. Y de ahí a la rueda de prensa. No negaré que uno de los mayores placeres que he descubierto esta semana es que poder escuchar a un director después de ver su película no tiene precio.
Y los días se sucedían. Pelis y más pelis con sus respectivas ruedas de prensa. Éramos como una familia. Todos nos conocíamos. Una semana intensa que ha dado muchos momentos especiales en ruedas de prensa... =)


Roberto Sosa, actor de la película "Victorio".
... pero también fuera de ellas.

mantener charlas profundas.
Poder comentar cada película sin miedo a ser pesada o hablar de cine buscando la profundidad de cada imagen es algo que se agradece. Yo siempre he afirmado mi gran pasión por este tipo de cultura pero, no negaré, que esta semana he podido estar en una dimensión totalmente diferente y extraordinaria. Es imposible intentar resumir todo lo vivido sin extenderme demasiado ya que no sólo hemos vivido con el cine sino también con autores de libros, expertos en cómics, galas de premios ... Increíble. Nunca mejor dicho, una semana de cine.
P.D: Es imposible dejar de destacar la Gala de Cine Español. Ver como Ana Milán presenta no tiene precio, tan cruel y a la vez tan simpática, como siempre.